Rusia Es una tierra de vastos extremos, que se extiende a lo largo de once husos horarios y abarca bosques, tundras y montañas. Posee una inmensa riqueza natural, pero gran parte de su historia ha estado marcada por la opresión y la desigualdad, donde unos pocos poderosos han gobernado a la mayoría desposeída.

La caída de la Unión Soviética en 1991 trajo consigo cambios políticos y nuevas libertades, pero décadas después, la nación sigue lidiando con profundas heridas: una economía en crisis, corrupción y una desilusión generalizada. Bajo el liderazgo de Vladimir Putin, Rusia sigue sumida en conflictos y guerras que han causado sufrimiento tanto en el país como en el extranjero. Sin embargo, incluso en esta sombra, la luz del Evangelio no se extingue.

En el corazón de Rusia occidental se encuentra Kazán, una de las ciudades más antiguas de Europa y la capital de la República de Tartaristán. Conocida por su rica cultura, su sólido sistema educativo y su herencia islámica, casi la mitad de los residentes de Kazán son... musulmanes tártaros, uno de los más grandes de Rusia grupos de personas no alcanzadas. En medio del endurecimiento del control gubernamental y el resurgimiento del nacionalismo, los seguidores de Jesús en Rusia —a menudo pequeños y dispersos— se erigen como faros de verdad y esperanza, proclamando que la libertad no se encuentra en la política ni en el poder, sino solo en Cristo.

Esta es una hora decisiva para la Iglesia en Rusia: levantarse con valentía, humildad y amor, proclamando que Jesús es Reyy que sólo Su Reino trae verdadera liberación y paz.

• Oremos por la salvación del pueblo tártaro., que los corazones se abrieran al Evangelio y que Jesús se revelara en sueños, visiones y relaciones. (Romanos 10:14–15)

• Oren por el arrepentimiento y la humildad. Entre los líderes de Rusia, que se inclinarían ante el Rey de Reyes y gobernarían con justicia y misericordia. (Proverbios 21:1, Salmo 72:11)

• Oremos por valentía y protección. para los creyentes en Kazán y en toda Rusia que enfrentan presión, vigilancia y persecución por su fe. (Hechos 4:29–31)

• Oremos por la liberación del engaño espiritual y del control ideológico., para que la verdad del Evangelio abriera paso a través del persistente espíritu del comunismo y del miedo. (Juan 8:32)

• Oremos por un avivamiento en toda Rusia, que las iglesias se unirían en oración, discipulado y misión, convirtiéndose en una fuerza de envío a todo grupo de personas no alcanzado dentro de sus fronteras y más allá. (Habacuc 2:14)