Los discípulos esperan en el aposento alto - Hechos 1:12-14
Introducción de la historia...
Después de que Jesús regresó al cielo, sus amigos subieron a una habitación en el piso superior de Jerusalén. La Biblia dice: «Todos se mantenían unidos en oración constante». No sabían exactamente cuándo vendría el Espíritu Santo, pero confiaron en Dios y esperaron juntos.
Pensémoslo:
¡A veces esperar puede ser difícil! Pero esperar también puede ser un momento para orar y confiar en Dios. Los amigos de Jesús oraron juntos en el aposento alto; no se apresuraron ni se ocuparon de otras cosas. ¿Recuerdas alguna ocasión en la que esperaste y confiaste en Dios?
Oremos juntos:
Querido Dios, ayúdame a ser paciente mientras espero tu respuesta. Ayúdame a recordar que siempre estás obrando, incluso cuando no puedo verlo. Enséñame a orar con mis amigos y familiares, como lo hicieron los discípulos. En el nombre de Jesús, amén.
Idea de acción:
Busca un lugar tranquilo hoy (quizás tu habitación o el jardín) y siéntate en silencio un minuto. Dile a Dios que estás esperando y escuchando.
Versículo de memoria:
“Espera el don que mi Padre prometió.” — Hechos 1:4b
El pensamiento de Justin
Esperar puede ser duro, ¿verdad? Como esperar tu turno en el columpio o esperar a que empiece tu programa favorito. Pero los discípulos esperaron juntos, orando y confiando en Dios. Y cuando vino el Espíritu Santo, ¡valió la pena la espera! A veces, Dios quiere que esperemos y oremos, porque tiene algo maravilloso planeado.
Los adultos:
Hoy, los adultos están orando para que los creyentes judíos y árabes permanezcan unidos, como una sola familia en Jesús, trayendo paz y esperanza.
OREMOS
Jesús, reúne hoy a los creyentes judíos y árabes en tu amor.
Espíritu Santo, haz que sean una sola familia que brille intensamente para tu Reino.